El objetivo es evaluar cómo la compañía selecciona y/o gestiona sus proveedores, cómo es capaz de cumplir la trazabilidad, las retiradas de producto y otros requisitos específicos del cliente. Agentes, importadores y brókeres deben, a su vez, supervisar el cumplimiento de sus proveedores para así garantizar que los productos cumplen con las especificaciones legales y contractuales pactadas. Sus responsabilidades serán: el aseguramiento de la información/especificación del fabricante, descripción del producto (temperatura, lote…), el aseguramiento de los requisitos individuales del cliente y de los requisitos propios y legales, tanto en el país de producción como en el del destino del producto. Las auditorías de IFS Broker son llevadas a cabo por auditores de Applus+ Certification los cuales evalúan los siguientes puntos:
- Responsabilidad de la dirección
- Sistema de gestión de la calidad y seguridad del producto
- Gestión de los productos
- Mediciones, análisis y mejoras
- Evaluación de Food/Product defense
Algunos de los factores que influyen en la duración de dicha auditoría son: el número y cantidad de alcances de los productos comercializados, número de países de origen y destino con los que trabajan, número de empleados de la oficina auditada, posible combinación con otras normas tales como IFS Food, IFS Logistic, …
¿QUE BENEFICIOS TIENE?
- Reducir costes y tiempos tanto a los proveedores como a los distribuidores.
- Asegurar la transparencia a lo largo de todo el proceso.
- Minimizar los tiempos destinados a la reelaboración de productos o de su devolución cuando éstos no sean conformes.
- Reducir el número y los costes de las auditorías/inspecciones de los clientes del Broker
- Auditorías independientes de terceras partes (sistema de evaluación uniforme) y mejora de la reputación como proveedor de productos seguros y de calidad mediante el uso del logo de IFS y el certificado.
- Controlar el cumplimiento de la normativa relacionada con los productos comercializados
¿A QUIÉN VA DIRIGIDA ESTA CERTIFICACIÓN?
Esta certificación va dirigida a personas o empresas que sean, o no, propietarias de un producto donde en la mayoría de las ocasiones no hay una posesión física de los mismos, que quieran garantizar a sus clientes que se han implementado las medidas adecuadas al servicio ofrecido y que sus proveedores están trabajando de acuerdo a los requisitos de calidad y seguridad del producto.